HIPÓTESIS SOBRE LA FORMACIÓN DE LA LUNA
Hipótesis de fisión
La Tierra y la Luna originariamente eran
un sólo cuerpo y parte de la masa fue expulsada, debido a la inestabilidad
causada por la fuerte aceleración rotatoria que en aquel momento experimentaba
nuestro planeta. La parte desprendida se quedó con parte del momento angular
del sistema inicial y, por tanto, siguió en rotación.
Hipótesis de captura
La Luna era un astro planetesimal
independiente, formado en un momento distinto al nuestro y en un lugar alejado
que tenía una órbita elíptica. Esta órbita habría sido modificada por los
efectos gravitacionales de los planetas gigantes, que alteraron todo el sistema
planetario expulsando de sus órbitas a diversos cuerpos. La Luna viajó durante mucho tiempo por el espacio hasta aproximarse a
la Tierra y fue capturado por la gravitación terrestre.
Hipótesis de acreción binaria
La formación de la tierra y la luna se formaron al mismo tiempo a partir del mismo material y en la misma zona del
Sistema solar. A favor de esta teoría se encuentra la datación radioactiva de
las rocas lunares de las diversas misiones espaciales, las cuales fechan entre
4.500 y 4.600 millones de años la edad lunar, aproximadamente la edad de la
Tierra.
Hipótesis de impacto
La científicamente preferida en la
actualidad. Supone que la luna se formó tras la colisión de la Tierra contra un
cuerpo de aproximadamente el tamaño de Marte. El impacto hizo que bloques
gigantescos de materia saltaran al espacio y, mediante un proceso de acreción, generó
la Luna.
Hipótesis de precipitación
La última explicación que ha aparecido, la
cual dice que la energía liberada durante la formación de nuestro planeta
calentó parte del material, formando una atmósfera caliente y densa, compuesta
sobre todo por vapores de metal y óxidos. Estos se fueron extendiendo alrededor
del planeta y , al enfriarse, precipitaron los granos de polvo que, una vez
condensados, dieron origen a la luna